Y fueron felices y comieron perdices...
Todos, humanos al fin, buscamos la vida de alguien que nos complete, que nos haga sentir únicos amados. Todas las movidas de juntarse, separarse, divorciarse o ensamblarse tienden a lo mismo. ¿Por qué es entonces tan difícil? casaras le manda mensaje de texto para insultarlo. Me corta cuando hablo, se pone imposible cuando Guillermo viene a casa". Lucas tiene 8 años y su mamá, Rosana 34. Está intentando formar una nueva relación con Guillermo, no consigue que ambos compartan un tiempo en paz, esto la angustia mucho porque estar dividida entre "dos amores" le trunca sus planes de volver a vivir en familia Las primeras preguntas van hacia los adultos. ¿Cómo fue tu separación del papá de Lucas? ¿Cuánto tiempo hace? ¿Crees que tu hijo acepto esa ruptura? El ensamble de los hijos con la nueva pareja siempre se suma a la relación preexistente. Regla N.º 1: antes de blanquear cualquier relación con los hijos, tienen que estar "cerradas" las relaciones anteriores. Es fundamental ser prolijo (con llamados telefónicos, mensajes, encuentros, etc.) para que el niño no sienta que el nuevo personaje es responsable de la separación de los padres. ¿COMO SE ENFOCA EL ENSAMBLE DE ACUERDO A LA EDAD DE LOS HIJOS? Con bebes y niños de hasta 3 años: El adulto recién llegado debe estar dispuesto a "habituarse" a las exigencias de horarios, hábitos y limitaciones del pequeño. Si se trata de alguien que ya fue padre (y padre comprometido), tomará como algo natural que su compañero no pueda verlo por una fiebre, un berrinche o un imprevisto. Es importante tener en cuenta que los chicos comprenden desde recién nacidos (incluso desde antes), lo que se les dice. Cuénteles lo que está pasando. Si la persona elegida no está dispuesta a tolerar "hijos ajenos", es mejor mantener la relación fuera de casa, aunque se resigne tiempo de "pasarla bien". Otro aspecto de ensamblar con hijos pequeños, en este caso ventajoso, es que el adulto recién llegado tiene más posibilidades de ocupar un lugar significativo en la psiquis del niño, es importante destacar que la confianza se logra compartiendo horas de juego, esto vale para padrastros, pero también para padres, tíos y cualquier adulto que quiera sumarse. Con chicos en edad escolar: la familia ya se encuentra más "libre" de acarrear pañales y mamaderas, pero se presenta ya se encuentra mía y las tareas como el asunto a ser acompañado de cerca. Con posibilidades de diálogo más profundo la regla de oro es anticipar, Avise desde escaparse por las noches, a pasar menos tiempo con los pequeños si tiene planes de "escaparse unos días". El mentiroso "voy a la costa con amigas" solo entorpece las cosas, porque Jos niños generan mucho rencor ante las mentiras de los adultos. Con adolescentes: en este caso más que en ninguno, el ensamble del adulto recién llegado no hace más que "agigantar" la situación que se vivía previamente. Si se venía "sufriendo" a los adolescentes (trastornos de conducta, escapes de la casa, adicciones o demás), el conflicto se trasladará en oposición, celos, peleas y excusas para la discordia con el padre conviviente. La recomendación fundamental es: ¡recuerden que los adultos son ustedes! Toneladas de paciencia, sentido común y límites amorosos son el secreto. Adolecer significa sufrir, y no dura para siempre...en unos años...la vida nos devuelve a los hijos como los seres racionales y cariñosos que educamos. Con hijos adultos: es notorio como se presentan en consultorio mujeres, y eventualmente hombres, generalmente abuelos o en edad de serlo, planteando resistencias de sus hijos respecto a su decisión de formar pareja. "A tu edad??" qué creencias ocultas encierra esta frase...que a tu edad no necesitas (o no mereces) vida sexual; que ahora ya no vas a estar disponible para tu función de abuela (y el cuidado de tus nietos); que si "alguna loca" se piensa quedar con mi herencia.... Aunque a usted, querido lector, le parezca demencial, ¡hay gente de 65 que tiene pareja...a escondidas de sus hijos! MADRASTRA...MAS ALLA DE LOS CUENTOS "Andrea me enseñó a hacer las camas, a usar bien los cubiertos, me compró mi primer corpiño y como combinar los colores de la ropa. Me ayudaba con la tarea y si no fuera por ella yo repetía de grado" Esto contaba Florencia, de 13 años, acerca de su madrastra. Si analizamos la Cenicienta, Blancanieves y otros cuentos clásicos, la figura de la madrastra aparece compitiendo por el amor de un mismo padre, y buscando "destruir" un amor legítimo por otro que pretende ser usurpador. O sea que la cuestión es la rivalidad. Una chica, que establece relación afectiva con un muchacho con hijos, tiene generalmente sueños de princesa: boda de blanco ante el altar, aventuras en pareja, ¿convivencia de afianzamiento...y que hay si su compañero “ya lo vivió”? se hace imprescindible que ella renuncie a sus fantasías de "ser la primera que...", un golpe al narcisismo que no todas las personas pueden tolerar. "En casa de mi mamá, puedo comer en la cama, a veces, mirando tele. Tomo solamente agua y cuando voy al colegio muchas veces llego tarde, porque el colectivo tarda mucho. Cuando me toca en lo de mi papá, me llevan a la escuela en camioneta y eso me gusta, pero comer en la cama no me dejan (Florencia, 6 años) pequeña muestra de la Doble exigencia que pesa sobre los hijos del ensamble adaptarse a 2 estilos de vida diferentes, donde las reglas de cada casa suelen ser contradictorias y el discurso cargado de desvalorización hacia los modos del bando puesto ¿Qué es lo que tiene que hacer un padrastro o una madrastra? Básicamente, identificar qué se espera de el/ella en el círculo familiar de su pareja y preguntarse seriamente si está dispuesto a ocupar ese rol. Es más que un simple: "yo no soy el padre...soy el amigo de la madre... (¿¿¿A quién querés engañar??? los niños son chicos, pero no tontos..." La convivencia con menores siempre es una responsabilidad: los chicos forman psiquis tomando aspectos de cualquier adulto que pase tiempo con ellos, más la de lazos sanguíneos, legales, ocultos o declarados. Lic. María Inés Álvarez Psicóloga (U.B.A)
